Por fin, el esperadísimo regreso
de toda la “fauna” de los cuentos de hadas. Comenzamos con un bonito
reencuentro familiar: Snow (me vais
a perdonar, los nombres van en inglés porque así es como la veo y si no, se me
hace raro), Charming, Emma, Henry,
pero también los siete enanitos, Red y
Granny.
Emma no lleva muy bien lo de niña abandonada por sus padres,
porque, por más que ahora conozca la verdadera razón, eso no cambia que haya
estado toda la vida sola. Pero lo importante va antes, y ahora que la maldición
se ha roto, hay mucho que organizar. Para empezar: Regina. Con la magia de vuelta en Storybrooke, puede ser todo un
peligro… ¡Pero no! La magia ha vuelto, pero no como en el Enchanted Forest.
Algo de magia si hay, pero Regina no
es poderosa. Y todos los habitantes de Storybrooke, que por una u otra razón se
la tienen jurada, ven la ocasión perfecta de hacérselas pagar. Sin embargo, Henry, a quien sí quiere todo el mundo,
pide que la dejen vivir. Al fin y al cabo, es su “madre”. Así, Regina es encerrada en el calabozo para
protegerla de los demás.
Quien sí conserva todo su antiguo
poder es Rumpelstiltskin (aka Mr. Gold). Como los demás, vio la
ocasión perfecta de deshacerse de su amienemiga Regina, y hacerle pagar por lo que le hizo a Belle, pero ella, que es “más buena que Marisol”, le hace prometer
que no la mataría. Sin problema: nuestro Rumple
es, además del alma de la serie, un hombre de recursos. Con la ayuda de un
misterioso medallón invoca a un “dementor”, que casi casi consigue absorber el
alma de Regina (Ah, pero ¿Regina tiene de eso? Pues eso parece…)
En el último momento, la “familia
real” la salva, pero el bicho va a volver, y no se le puede matar, así que la
mejor opción es mandarlo donde no pueda dañar a nadie (ejem): de vuelta al
mundo de los cuentos, donde, según Regina,
ya no hay nada. Utilizando el sombrero de Jefferson,
The Mad Hatter, abren un portal (¡Ojo! El portal no se abría hasta que Regina toca a Emma, parece que tiene más magia de la que ella misma imagina) y
mandan al Nazghul… pero el bicho se agarra al pie de Emma arrastrándola (muy rollo Balrog) al otro mundo, y Snow salta tras ella. Charming lo intenta, pero llega con el
portal ya cerrado. Otra vez hay un mundo entre este pobre hombre y su familia.
Por otra parte, en el mundo
mágico (que diga Regina lo que diga, sí que sigue existiendo) conocemos a Mulan y el Principe Philip, que encuentran y despiertan a Sleeping Beauty. El mundo mágico se ha vuelto un lugar duro, inhóspito
y peligroso. Y sobre todo, los efectos de la maldición de Regina también se han notado: lo que no desapareció, se congeló en
el tiempo. Cuando abren el portal en Storybrooke para deshacerse del espectro,
lo envían aquí, y el príncipe Philip
lo paga con su vida. Por eso, cuando Mulan
y Aurora encuentran a Snow y Emma, no tienen muy buena actitud hacia ellas precisamente…
@Neko_Aidi
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